El análisis empresarial: La diferencia entre el fracaso y el éxito.

El consejo de esta semana, será válido para todos los aspectos de la vida, no únicamente en el aspecto laboral o profesional. Y digo esto, porque el día a día nos puede llegar a absorber y tomar decisiones importantes sin un análisis previo. Ya es sabido por todos que las prisas no son buenas consejeras y si a esto le unimos la ignorancia, obtenemos el cóctel del fracaso y su agrio sabor. ¿A qué me refiero?

Pues inevitablemente, el ser humano es soberbio y, en momentos, arrogante cuando se trata de una idea suya. Piensa en que todo lo tiene controlado y esto precisamente, hace que pierda el control. Conocer las fortalezas y debilidades de un proyecto nos ayuda a identificar los puntos críticos de este, y por lo tanto, a evitar el fracaso empresarial.

Por todo ello, el análisis en la gestión empresarial se vuelve imprescindible e imperioso cuando se planteen cuestiones estratégicas o vitales para la empresa. Así como, semanas atrás consideramos los 5 consejos vitales antes de emprender, hoy añadiremos un quinto consejo: El análisis empresarial: La diferencia entre el fracaso y el éxito.

Si buscas que tu idea o proyecto empresarial no fracase a las primeras de cambio y tenga un éxito sostenible, debes ser meticuloso con el análisis de los puntos críticos. Ya te adelanto que los principales análisis deben enfocarse hacia las necesidades de capital (y como conseguirás la financiación), la previsión de ventas y gastos, y la rentabilidad. Esto evitará que tu proyecto se desangre por la falta de liquidez, o bien, te des cuenta a tiempo, que no es tan rentable como considerabas en un primer momento.

A su vez, me permito darte otro consejo: El análisis es interno, para uno mismo. No te vendas una mentira. Evita el optimismo en las ventas, porque los primeros meses de vida, es muy difícil conseguir un volumen alto en ventas. Siguiendo el consejo de un gran experto en este tema, una vez que hayas realizado una previsión de ventas lo más realista posible, redúcela a la mitad. Si aún así, el proyecto resulta rentable, adelante con el. También debes plantear gastos excepcionales y que necesidades de liquidez pueden aparecer.

También es válido el análisis previo a la toma de decisiones para cualquier aspecto de la vida, ya sea, la compra de un valioso activo, una oferta de trabajo o incluso, en las relaciones personales (el matrimonio sería un ejemplo de necesidad de análisis previo). Pensar antes de actuar tiene beneficio doble, por una lado puedes evitar errores y actúas adecuadamente, y por otro lado, en caso de fracasar, haber trazado un plan alternativo. 

Por último, debemos conocer el sector, con un buen análisis sectorial y realizar un correcto análisis de mercado. Todo ello, nos servirá de apoyo para la toma de cualquier decisión. Es más fácil tomar una decisión correcta, si conoces el impacto que puede tener y la necesidad de tomarla. El fracaso y el éxito de tu idea empresarial o proyecto dependerán de las decisiones que tomes, y te conviene dedicarle un tiempo para analizarlas.

Definitivamente, el saber no ocupa lugar.

Si el consejo te parece útil, no dudes en compartirlo, comentarlo o darle a me gusta.

Por último, si necesitas ayuda en el análisis de tu proyecto, puedes contactarme y te ayudaré desinteresadamente.